Los efectos del alga invasora (Rugulopteryx Okamurae) siguen siendo devastadores para el sector pesquero de las provincias afectadas, que ya vienen a ser la gran mayoría de las costas de nuestra Comunidad.
Según un documento que, desde la lonja pesquera de Barbate, se ha enviado a la asesora técnica del Ministerio de Transición Ecológica y el Reto Demográfico sobre el impacto de la bio-invasión del alga en los fondos marinos del Estrecho y Mar de Alborán, entre 2014 (antes de la invasión, que fue citada en noviembre de 2015 por el Museo del Mar de Ceuta) y el 2021, se ha producido un descenso del 90% en kilos capturados y del 70% en las ventas realizadas.
Así, en 2014, se capturaron 820.045,96 kilos de pesca y en el año que acabamos de terminar, en 2021, esa cifra se redujo hasta los 81.054,68 kilos. Eso supone que en 2014, las ventas alcznaron los 2.304.272,95 euros
y en 2021, sólo 716.768,23 euros.
Con estos datos, si se mantiene la tendencia, los 700 barcos que se dedican en Andalucía a la pesca artesanal lo van a tener muy mal para sobrevivir, las pesquerías asociadas a roca y profundidades medias están en clara regresión y son 2.800 personas que viven de forma directa de un servicio ecosistémico, la salud de la mar, la soberanía alimentaria, la cultura pesquera y la gastronomía de calidad.
