Un submarino nuclear norteamericano de ataque de la clase Seawolf (SSN), arribó a la Base Naval en Gibraltar, este fin de semana.
La llegada del sumergible ha vuelto a provocar las críticas de Verdemar Ecologistas en Acción que ha pedido la activación del Plan de Emergencia Nuclear de la Armada y la activación de los GOVRA (Grupos de Vigilancia Radiológica Ambiental de la Armada) con el objetivo de controlar la llegada de este tipo de naves, a las que califican como «bombas flotantes».
Verdemar asevera que los movimientos que ha habido en la Bahía de Algeciras son sospechosos y la sociedad civil necesita información, por lo que los ecologistas piden que de una vez por todas que Gibraltar quede libre de naves de propulsión nuclear como los submarinos de la clase Trafalgar, que según apuntan, tienen problemas de diseño.
