Una colisión entre dos barcos provoca un derrame de petróleo en el río Rin

Se han vertido más de 2000 litros de crudo

El choque de dos barcos ha provocado un derrame de 2.000 litros de petróleo en el río Rin a la altura de la ciudad alemana de Dormagen, según ha informado este lunes un portavoz de los Bomberos de Duseldorf.

Los equipos de emergencias han desplegado barreras en los accesos a los puertos cercanos para evitar que el crudo se extienda hasta allí. El accidente se registró esta mañana, alrededor de las 06:27 horas locales (05:27 GMT) cerca de la ciudad Dormagen e involucró a un petrolero alemán y un barco de carga de los Países Bajos, que transportaba unas mil 500 toneladas de harina de soja.

Sin embargo, en el Rin el vertido no puede contenerse con estas mismas barreras debido a la gran velocidad del caudal. Por ello, continúa fluyendo hasta la vecina localidad de Duisburgo.

El Departamento de Bomberos de Dormagen informó que poco después del mediodía de este lunes, alrededor de dos mil litros de gasóleo se habían derramado sobre el río Rin, por lo que fueron varios enviados 50 equipos de emergencias a la zona para desplegar barreras y evitar su extensión.

“Como resultado, las entradas a los puertos de Medienhafen, en Rober-Lehr-Ufer, el puerto Volmerswerther y el puerto deportivo en Rotterdamer Strabe se han cerrado”, destacó el Departamento en un breve comunicado, según un reporte del diario Westdeutsche Zeitung en línea.

El derrame de petróleo se dirigía esta tarde hacia la zona del Ruhr, hasta donde fueron desplegadas brigadas de bomberos de las ciudades Neuss, Mettmann, Düsseldorf, Colonia y de Dormagener, aunque horas después la mancha de petróleo había llegado hasta la ciudad de Düsseldorf.

Las brigadas tenían previsto que quedarse en la zona afectada hasta el miércoles próximo, aunque esa noche el portavoz del departamento de bomberos confirmó que “no era necesario un bloqueo, ya que la mancha de gasóleo se había diluido muy rápidamente debido a la alta velocidad de flujo en el Rin”.

El portavoz destacó que la velocidad de flujo de agua entre los siete a nueve kilómetros por hora logró diluir la enorme mancha que dejó el choque entre las dos embarcaciones, cuyas causas no son claras aún. “Las investigaciones están en curso”, apuntó.

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