La Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos (UPA) ha participado en una inspección in situ del nuevo sistema de control fronterizo en el Puerto de Algeciras. La delegación, encabezada por Cristóbal Cano, vicesecretario general de Acción Sindical Sectorial y secretario general de UPA Andalucía, ha conocido de primera mano el funcionamiento de este programa piloto, desarrollado en el marco del acuerdo de 43 medidas de apoyo al campo firmado entre UPA y el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación.
Este nuevo modelo de control, que comenzó a aplicarse el pasado 1 de octubre en el Puerto de Algeciras, será replicado en todos los Puestos de Control Fronterizo de España a partir del 20 de enero de 2025. Su principal objetivo es reforzar los controles a las importaciones agroalimentarias procedentes de terceros países mediante un sistema de inspección integral, que garantice en una sola intervención el cumplimiento de la normativa comunitaria, la legislación nacional, los requisitos fitosanitarios y las normas de etiquetado.
La delegación de UPA ha estado integrada, además de Cristóbal Cano, por Roque García, vicesecretario general de Desarrollo Rural, Manuel Piedra, secretario de Políticas Migratorias, y Paula Sánchez, técnica de UPA Federal. La visita ha contado también con la participación de representantes técnicos del Ministerio de Agricultura y la directora del Puesto de Inspección Fronteriza (PIF) de Algeciras, Isabel Sánchez-Trasancos.
El acceso de UPA a una inspección en tiempo real de los productos agroalimentarios importados, procedentes en esta ocasión de Marruecos, Perú y Costa Rica, supone un hecho sin precedentes en el sector agrario español. Se trata de la primera vez que una organización agraria participa de forma activa en una inspección de este tipo, lo que refuerza su implicación en la supervisión del comercio agroalimentario.
Mando único y mayor eficacia en la inspección
El nuevo sistema se basa en la creación de un «mando único» gestionado por la Dirección General de Sanidad de la Producción Agroalimentaria y Bienestar Animal del Ministerio de Agricultura. De esta forma, los equipos de inspección —compuestos por agrónomos y veterinarios— operan de forma coordinada bajo una misma dirección.
Este modelo supone una mejora operativa, ya que permite la realización de una sola inspección que incluye el control de todas las normativas exigidas. A diferencia del sistema anterior, donde se realizaban múltiples inspecciones por parte de diferentes organismos, ahora se trabaja con una base de datos unificada y un único equipo de control. Esto no solo aumenta la eficacia de la inspección, sino que también reduce la carga burocrática y agiliza la logística de los operadores.
Cristóbal Cano ha destacado que este nuevo sistema ha permitido «un incremento considerable en el número de controles físicos» y ha subrayado que su implementación no ha supuesto un obstáculo adicional para la operativa logística de las empresas. La concentración de competencias en un mando único y la automatización de procesos han permitido, según Cano, «garantizar una mayor presión inspectora sin afectar la agilidad en la operativa de los operadores comerciales».
Un control más exhaustivo para proteger la seguridad alimentaria
El Puerto de Algeciras, por donde transita entre el 60% y el 70% de las importaciones vegetales que ingresan en España, ha sido el enclave elegido para la puesta en marcha de este sistema piloto. Con la aplicación del nuevo modelo, UPA ha constatado que se están llevando a cabo controles «más intensos y exhaustivos» en comparación con los anteriores procedimientos.
Una de las principales reivindicaciones del sector agrario durante las movilizaciones de principios de 2024 fue la falta de control de las importaciones agroalimentarias de terceros países, especialmente en lo que respecta a la competencia desleal y la seguridad alimentaria. Este nuevo sistema de control fronterizo busca precisamente responder a esas demandas.
Cristóbal Cano ha señalado que «el riesgo cero no existe, pero hay que ser ambiciosos en el perfeccionamiento de todos los procesos implicados en la inspección». En este sentido, UPA ha anunciado su compromiso de seguir participando activamente en el grupo de trabajo de comercio exterior, creado en el marco del acuerdo de 43 medidas con el Ministerio de Agricultura, con el objetivo de proponer mejoras continuas al sistema.
El acceso de UPA a la información proporcionada por el Ministerio, así como la retroalimentación que la organización ofrece a la administración, se considera fundamental para la mejora de este sistema de control. Según Cano, «la colaboración entre el sector agrario y la administración pública es esencial para garantizar una mayor transparencia y eficacia en el control de las importaciones».
Próxima implantación a nivel nacional
El sistema piloto, que ya se está aplicando en el Puerto de Algeciras, se extenderá al resto de Puestos de Control Fronterizo de España a partir del 20 de enero de 2025. Este despliegue supone un cambio estructural en la forma de controlar las importaciones agroalimentarias, especialmente aquellas que provienen de terceros países con normativas menos exigentes que la de la Unión Europea.
Con la implementación de este nuevo sistema, se espera un aumento en la seguridad alimentaria y en la equidad competitiva, ya que se endurecerán los controles para evitar la entrada de productos que no cumplan con los requisitos exigidos a la producción nacional. Esta medida, que ha sido largamente reclamada por el sector agrario, se presenta como un paso decisivo para garantizar la competencia justa entre las producciones locales y las importaciones extranjeras.
El refuerzo de los controles no solo tiene impacto en la seguridad alimentaria, sino que también responde a la demanda de los agricultores españoles de contar con un mercado más equitativo, donde se asegure que los productos importados cumplen las mismas normativas de producción, etiquetado y requisitos fitosanitarios que los exigidos a los productos nacionales.
Con esta medida, el Ministerio de Agricultura busca garantizar la seguridad alimentaria de los consumidores y proteger la producción agroalimentaria nacional frente a la competencia desleal. Por su parte, UPA se ha comprometido a seguir participando activamente en la supervisión y mejora continua de este sistema, que promete ser uno de los principales avances en el control de las importaciones en los últimos años.