La Junta de Andalucía tiene previsto poner en marcha el próximo mes de octubre una línea de ayudas con un presupuesto de 2,5 millones de euros destinada a la flota pesquera andaluza afectada por la presencia del alga invasora de origen asiático rugulopteryx okamurae. La consejera de Pesca, Carmen Crespo, ha instado al Gobierno de España a involucrarse en la búsqueda de soluciones para hacer frente a la expansión del alga invasora, al mismo tiempo que ha anunciado el paquete de medidas de apoyo.
Crespo ha señalado que la proliferación del alga ha tenido un impacto notable en las áreas marítimas de Andalucía, extendiéndose desde el Estrecho de Gibraltar hasta el océano Atlántico y el mar Mediterráneo. La consejera ha resaltado que esta situación representa un desafío significativo para la pesca artesanal en la región. La detección inicial del alga invasora tuvo lugar en 2015 en las cercanías del Estrecho de Gibraltar, propagándose posteriormente y desplazando a las especies autóctonas.
La consejera ha explicado que las ayudas estarán dirigidas hacia los pescadores artesanales afectados por la presencia del alga, ya que esta afecta negativamente su capacidad de pesca. Además, Crespo ha hecho un llamado al Gobierno central para que participe de manera similar a como lo ha hecho la Junta de Andalucía, impulsando un estudio realizado en colaboración con el Instituto de Investigación y Formación Agraria y Pesquera de Andalucía (IFAPA) y la Agencia de Gestión Agraria y Pesquera de Andalucía (AGAPA). El objetivo de este estudio es explorar posibles enfoques de economía circular que permitan aprovechar el alga invasora de manera sostenible.
No obstante, Crespo ha destacado que la responsabilidad de definir los posibles usos del alga recae en el Gobierno central. La consejera ha expresado que hasta el momento, no se ha llevado a cabo ninguna investigación por parte del Gobierno ni se han proporcionado ayudas complementarias a las ofrecidas por la Junta de Andalucía.
Crespo ha subrayado la urgencia de la situación, ya que el alga invasora ha colonizado ya todo el litoral andaluz, expandiéndose desde el Estrecho de Gibraltar hasta el Cabo de Gata en Almería. Esta expansión ha tenido un impacto negativo en las especies pesqueras locales, generando una compleja problemática para los pescadores y el ecosistema costero en su conjunto.