El crucero ‘Wind Surf’ hace su segunda escala del año en Almería

El lujoso barco transporta a 250 pajareros

El crucero ‘Wind Surf’, de la naviera Windstar Cruises, ha llegado a Almería, en la que es, la  segunda de las cuatro escalas que realizará este año en el Puerto almeriense. El precioso velero de cinco mástiles, está consignado por J. Ronco y Cia, y realiza un viaje de ocho noches por el Mediterráneo occidental y el Atlántico, tras iniciar su recorrido en Barcelona el 30 de julio, para finalizar el 7 de agosto en Lisboa.

El crucero-velero, que navega con bandera de Bahamas, tiene capacidad para algo más de 400 personas -entre tripulación y pasajeros-. Se trata de un velero de 5 mástiles, de 52 metros de altura y 7.000 metros cuadrados de velas, que navega a vela y motor.

Construido en los astilleros Ateliers et Chantiers du Havre (Francia), fue inaugurado en 1990 y reformado en 1998. Todos los camarotes de este barco son exteriores. Dispone de una plataforma marina en popa, donde se pueden practicar deportes acuáticos. Su decoración interior, muy marinera, destaca por sus maderas y elegante mobiliario. La oferta gastronómica, el servicio personalizado y el ambiente familiar son otros de los atractivos de este barco, que es, como se conoce en el sector, un crucero ‘180 grados de lo habitual’.

Casi 250 turistas, en su mayoría de Estados Unidos, han llegado al Puerto de Almería a bordo del lujoso crucero procedentes de Cartagena y con destino a Málaga.Durante las más de doce horas de estancia en Almería, los pasajeros del ‘Wind Surf’ las han reservado para descubrir algunos de los encantos que ofrece la provincia y que son poco conocidos en el exterior. Un numeroso grupo ha preferido quedarse en la ciudad, para recorrer el casco histórico y el centro, donde el Ayuntamiento de Almería les ha dado la bienvenida con un espectáculo folclórico en la plaza Careaga. Otros pasajeros han preferido conocer los rincones típicos de Mojácar y La Alpujarra, y otros, amantes del turismo activo, han elegido pasar el día practicando kajak en el parque natural Cabo de Gata-Níjar.

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