El presidente del Clúster Marítimo-Marino de Andalucía (CMMA), Javier Noriega, y el rector de la Universidad de Málaga (UMA), José Ángel Narváez, han firmado un convenio con el objetivo de impulsar la adaptación de las empresas para hacer frente al cambio climático, un campo en el que los socios del CMMA ya llevan un buen camino recorrido en virtud de las homologaciones que han debido implementar, dotándose así de estrictos protocolos medioambientales. Este convenio se firma, en concreto, con la Cátedra FYM de Cambio Climático de la Universidad malagueña, una institución cuyo mecenas es la empresa FYM-HeidelbergCement Group, propietaria de la fábrica de cemento de La Araña.
Según consta en el acuerdo, la UMA y el CMMA comparten la visión acerca de los valores y principios que desempeñan las organizaciones empresariales, sociales e instituciones públicas «como agentes de transformación real y efectiva en la modernización» social, económica y ambiental, así como también tienen visiones comunes sobre la importancia del papel que juega la investigación en el marco universitario, a efectos de lograr «un conocimiento más profundo sobre las medidas de necesaria implementación para mitigar y adaptar a las empresas para enfrentar los futuros escenarios del cambio climático, e igualmente la necesidad de impulsar las herramientas de transferencia para mejorar la sostenibilidad y circularidad de las actividades que se desarrollan en el ámbito de la Economía Azul».
La colaboración entre la Cátedra FYM de Cambio Climático de la UMA y el Clúster se desarrollará en las siguientes «líneas de actuación conjuntas de generación de conocimiento, proyectos e innovaciones en todo lo concerniente al ámbito de la sostenibilidad y la Economía Circular», en el marco del convenio ya firmado en 2015: «Impulsar la colaboración técnica en los ámbitos definidos para la promoción de medidas orientadas a la mitigación y adaptación de las empresas a los efectos del cambio climático; impulsar de forma conjunta proyectos y actividades encaminados a la transferencia de resultados entre los grupos de investigación y las empresas en el ámbito de la Economía Azul; dedicar especial interés a la Economía Circular y la sostenibilidad en el sector turístico e impulsar la actividad de divulgación y comunicación» en este contexto.
De esta manera, ambas entidades colaborarán con el fin de desarrollar la Economía Azul bajo la perspectiva de la sostenibilidad y la Economía Circular, participarán activamente y se asesorarán mutuamente en sostenibilidad y en todo aquello que suponga una aportación para contribuir a paliar los efectos del cambio climático, organizarán actividades formativas, jornadas, talleres, seminarios para la formación y capacitación de profesionales del sector y de actividades dirigidas a la implantación de metodologías y procesos innovadores en las empresas, así como también participarán conjuntamente en proyectos nacionales o internacionales.
Se crea, asimismo, una Comisión de Seguimiento paritaria con dos representantes de la UMA y dos de la Cátedra FYM de Cambio Climático, un órgano que se reunirá trimestralmente para determinar las acciones previstas. El convenio estará vigente hasta septiembre de 2022.