La ATCBA se sumará a la huelga de transportistas

La protesta se debe a la imposición del Gobierno de transportar hasta 44 toneladas

La Asociación de Transportistas de Contenedores de la Bahía de Algeciras va a celebrar una asamblea, en los próximos días, con la que pretende sumarse a los paros que el sector ha convocado para los días 27 y 28 de julio, ante la negativa de los camioneros a aceptar la imposición del Gobierno de transportar hasta 4 toneladas más de carga en cada vehículo (44), haciendo que estos alcancen los 4,5 metros de altura.

Supone un incremento en el coste de explotación por un ingreso similar, haciendo que estos vehículos sean incompatibles para el transporte en rutas internacionales

Las principales organizaciones del transporte en nuestro país consideran una “provocación” la aprobación de esta medida, ya que supone un incremento en el coste de explotación por un ingreso similar, haciendo que estos vehículos sean incompatibles para el transporte en rutas internacionales. Diego Piñel, presidente de la asociación de transportistas de la Bahía lamenta la actitud del Gobierno y de la Asociación de Cargadores de España que han aprobado esta medida de forma unilateral.

Los camioneros también reclaman la atención necesaria para articular todas las iniciativas necesarias para afrontar las pérdidas de casi un 43 por 100 sufridas por el sector a pesar de no haber dejado de operar durante el confinamiento. Entre las medidas solicitadas, los transportistas piden más flexibilidad en la aplicación de los ERTE, facilidad para el pago de las cuotas de los contratos de leasing de los camiones y que no se obligue a los conductores a realizar las labores de carga y descarga.

Esta situación ha generado un clima de indignación que lleva a la convocatoria de paro anunciada, sobre todo porque se suma a la falta de respuesta por parte del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana a las peticiones del sector remitidas en sus documentos de febrero y marzo reclamando medidas de tipo económico y de naturaleza estructural tras haber soportado  estoicamente los tres meses de confinamiento como consecuencia de la pandemia, sin dejar de operar y con graves pérdidas por parte de empresas y trabajadores.

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