Agaden y Fapacsa protestan ante Capitanía Marítima

Se trata de exigir soluciones a los problemas que genera en el litoral la invasión de algas

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Agaden-Ecologistas en Acción y FAPACSA han llevado a cabo una acción de protesta a la entrada de Capitanía Martina, al objeto de reclamar que esta entidad se implique más para tratar de solucionar el problema existente en ambas orillas del Estrecho de Gibraltar y, particularmente, en la zona de la costa Este del Parque Natural del Estrecho, que se han visto invadidas por una variedad de alga originaria del pacífico noroccidental, denominada Rugulopterix okamurae.

Los ecologistas insisten en que han tenido lugar enormes arribazones, acumulaciones visibles de algas depositadas por acción de la mar en las playas que han quedado inaccesibles, generando costes económicos derivados de la necesidad de retirarlas para evitar molestias a los usuarios

Los ecologistas insisten en que han tenido lugar enormes arribazones, acumulaciones visibles de algas depositadas por acción de la mar en las playas que han quedado inaccesibles, generando costes económicos derivados de la necesidad de retirarlas para evitar molestias a los usuarios. A esto hay que sumar que la fermentación y putrefacción de las algas, unidas a una permanencia prolongada en el litoral, han generado malos olores que se extienden  por zonas aledañas a la franja costera afectada.

Por otra parte, en lo relativo al medio marino, Agaden insiste en que se aprecia desplazamiento de distintas especies en las zonas afectadas por la enorme proliferación de estas algas, especialmente el erizo de mar y, además, se constata la inutilización de artes de pesca y la reducción de capturas en la pesca extractiva y deportiva asociadas a fondos de hasta 40 metros de profundidad.

La proliferación de algas está afectando, no sólo al sector pesquero de bajura y deportivo, sino también a la imagen del turismo que busca playas limpias y se encuentra verdaderos vertederos.

Hace un año la Junta Rectora del Parque Natural del Estrecho aprobó una iniciativa exigiendo a la APBA y a la Capitanía Marítima del Puerto de Algeciras el cumplimiento del Convenio Internacional para el control y la gestión del agua de lastre y los sedimentos de los buques (OMI, 2004) y según los ecologistas, no se conoce ninguna medida al respecto, habiéndose duplicado la extensión que coloniza a una media del 75% del estrato submarino.

Los conservacionistas afirman que la zona afectada va ahora desde el Puerto de Sotogrande hasta Cabo Trafalgar y en la orilla Sur, desde Ceuta hasta Tánger (Marruecos). Su expansión salvaje y explosiva sólo puede entenderse, entre otras posibilidades, porque existe una entrada continua que debe ser bloqueada para frenar la enorme colonización que existe en nuestras costas.

Agaden-Ecologistas en acción y Fapacsa exigen la retirada de las grandes masas en aquellas zonas donde los ayuntamientos no pueden actuar, medida muy necesaria para reducir su reproducción y afección al ecosistema. Esta especie presenta propágulos vegetativos que le permiten una elevada y rápida propagación, dispersión y producción, por lo que no se hace recomendable el segado submarino para su eliminación.

Ante esta situación, Agaden-Ecologistas en Acción y Fapacsa exigen a la APBA y Capitanía Marítima de Algeciras, que por parte de los ayuntamientos afectados y la Consejería de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible, se establezca un tratamiento efectivo de las aguas de lastre, impidiendo que se vierta de manera descontrolada, provocando perjuicios como los anteriormente constatados. Además, piden a la APBA que aporte la ayuda necesaria al Parque Natural del Estrecho para la retirada controlada de los arribazones con efectos negativos para la costa.

Por último, reclaman un Plan de Acción conjunto entre los ayuntamientos afectados, la Diputación de Cádiz, la Consejería de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible y el Ministerio de Transición Ecológica para la reducción del daño de un problema sin solución, que al menos contenga un plan de choque, mediante un equipo técnico especializado. También insisten en exigir estudios de campo, mediante la caracterización de bioactivos y el desarrollo de una estrategia para una gama de productos de cara a eliminarla por su valorización.

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