Agentes de la Guardia Civil pertenecientes a la Sección Fiscal de la Aduana del Puerto de Algeciras han procedido a la detención de un súbdito marroquí al que se acusa de un presunto delito contra el derecho de los ciudadanos extranjeros, al tratar de introducir de manera ilícita a dos compatriotas adosados a los bajos de una furgoneta de reparto.
Una persona fue atendida en dependencias de la Guardia Civil hasta su total recuperación
El vehículo, que llegó al puerto algecireño procedente de Tánger, fue inspeccionado a su paso por el control del Resguardo Fiscal, levantando inicialmente las sospechas de un perro detector de tabaco del servicio cinológico de la Guardia Civil, que marcó insistentemente a su guía la existencia de algo anómalo bajo el furgón.
Al intentar comprobar los Guardias Civiles qué alertó al animal, encontraron una estructura soldada a la del propio vehículo que servía de habitáculo a dos personas adultas que viajaban tumbadas longitudinalmente. Inmediatamente se procedió a extraer a una de estas personas que se encontraba en buen estado de salud, pero en el caso de la segunda, que no presentaba movilidad y que no respondía a estímulos externos, tuvo que ser rescatada después de utilizar un elevador que facilitase su extracción, lo que se prolongó durante al menos treinta minutos.
Alertados los servicios de emergencia, esta segunda persona fue atendida en dependencias de la Guardia Civil hasta su total recuperación.
Las diligencias policiales instruidas fueron puestas a disposición del Juzgado de Instrucción en funciones de Guardia de los de Algeciras junto al detenido. En el caso de los inmigrantes irregulares, fueron entregados con las debidas garantías al Cuerpo Nacional de Policía, responsable de las labores de extranjería.