El acuerdo de pesca con Marruecos no se aplicará hasta 2019

La tardanza en la conclusión de los trámites lleva a la flota a solicitar ayudas

El sector pesquero andaluz ha expresado su queja por la falta de agilidad y la falta de información en relación a la marcha del trámite para la entrada en vigor del acuerdo pesquero con Marruecos.

El pasado mes de junio la UE y el Gobierno del país norteafricano alcanzaron un acuerdo que fijaba las condiciones del nuevo contrato que – en lo que respecta a la flota del Campo de Gibraltar –  prácticamente se mantienen respecto al Tratado el anterior. No obstante, la flota – armadores y pescadores – se encuentran pendientes de dos trámites esenciales, el debate y aprobación en cada uno de los parlamentos (el europeo y el marroquí) y la posterior firma del nuevo convenio de pesca por parte de los mandatarios de ambas partes.

El sector ha denunciado que desde junio no se ha movido un papel y no están recibiendo información sobre los calendarios previstos

El sector ha denunciado que desde junio no se ha movido un papel y no están recibiendo información sobre los calendarios previstos, de manera que el presidente de los armadores, Pedro Maza, ha explicado que – de mantenerse este ritmo de trabajo, el acuerdo no será efectivo hasta 2019.

Maza, ha mostrado el desencanto de las flotas del Campo de Gibraltar con las cifras pactadas con las autoridades de Marruecos, porque los pescadores de la comarca necesitan de una cuota más alta del atún rojo, puesto que la actual la consideran insuficiente debido a la rentabilidad que produce la captura de túnidos.

Las negociaciones para la renovación del acuerdo de pesca entre la UE y Marruecos comenzaron el pasado mes de abril en Rabat y han concluido tres meses después tras cinco encuentros entre ambos representantes de los Ejecutivos de uno y otro lado del Estrecho de GIbraltar.

El anterior acuerdo permitía el acceso a una cuantía máxima de un centenar de barcos españoles a la zona de pesca de Marruecos en el Atlántico, a cambio de cuarenta millones de euros, cuyo coste era abonado al noventa por ciento por la Unión Europea y el diez por ciento por los armadores.

Salir de la versión móvil