Comienza la ICCAT con la esperanza de un incremento de la cuota para las almadrabas

La Comisión Internacional para la Conservación del Atún Atlántico (Iccat, por sus siglas en inglés) celebra, desde este martes, su 25ª asamblea anual, que se prolongará hasta el próximo día 22, en una cita que servirá para decidir la cuota de capturas de atún rojo.

Los científicos que asesoran a Iccat han acreditado la abundancia de la pesquería y han apoyado que la cuota se incremente gradualmente entre 2017 y 2020, por lo que es previsible que la negociación concluya con un mayor cupo. No obstante, aún sigue pendiente de discusión en qué grado, ya que al aporte científico hay que sumar otros argumentos, como los políticos o los intereses de mercado.

El sector almadrabero asiste con expectación a esta cita, que puede marcar un antes y un después en cuestiones como el empleo o los salarios. Luciano Muriel, portavoz de la Almadraba de Tarifa, asegura que las perspectivas son «muy buenas» gracias a los informes científicos. “A la subida del año pasado, se va a unir – así lo esperamos – un incremento aún mayor, avalado por los informes científicos, ya que nosotros estamos viendo día a día, como crece la población de atunes”. Muriel asegura que de aprobarse la subida de la cuota, prevista en un 25%, el sector iniciará, este próximo año, de forma definitiva, su definitiva recuperación.

El sector asiste con cierto nerviosismo al ICCAT de este año justo cuando se cumple una década, del inicio de los problemas en el sector. En ese tiempo, la cuota de captura, que llegó a las 1.500 toneladas en 2006, cayó a las 650 en el año 2011, uno de los más duros de la crisis. No obstante, el cupo ha ido creciendo hasta superar las 1.000 toneladas el pasado año.

En este tiempo, la almadraba de Tarifa ha perdido 20 puestos de trabajo y los que continúa, han tenido que ajustarse a recortes en pluses y complementos en sus nóminas, que en la mayoría de los casos apenas supera los mil euros al mes.

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