Aunque los contactos entre los abogados de Coordinadora, el sindicato mayoritario en el sector de la estiba y los responsables de Anesco, continúan de forma extraoficial, la ausencia de una nueva convocatoria de la mesa de negociación, tal y como se barajó a finales de la pasada semana, hace presagiar una nueva jornada de paros en las terminales del puerto de Algeciras, para mañana miércoles, 7 de junio, tal y como solicitaron los sindicatos.
No obstante, la ausencia de tráficos por el desvío de buques a otros puertos, ante la posibilidad de que un bajo rendimiento en la actividad provoque retrasos en las operaciones, mantendrá la reducción de movimientos en las instalaciones de APMT y TTIA.
En la primera de estas terminales, no hubo movimientos en la primera jornada de huelga del lunes, pero para este martes se han nombrado en principio, 15 manos. Mientras, en TTIA se efectuaron algunas operaciones, pero en las últimas horas han sido media docena de barcos los que se han desviado a otros puertos, ante la segunda jornada de huelga anunciada para el miércoles.
Mientras tanto, ANESCO insiste en denunciar las bajadas de producción como medida de presión a algunas de las empresas asociadas, para forzar la negociación calificándolas como, ”acciones ilegales”. La patronal espera que a lo largo de este martes, día en el que supuestamente se recupera, de forma momentánea, la normalidad en las dársenas, no se repitan episodios de bajadas de producción selectivas con objeto de alterar el mercado y hacer daño a las compañías, ya que en algunos casos se están produciendo descensos del 70% respecto al ritmo habitual de trabajo en la estiba y desestiba de los buques, algo que niegan los sindicatos que ya han registrado los preavisos de huelga para los días 14 y 15 de junio, en los que los paros serán totales, durante 48 horas y 20, 22 y 24 de junio, en el que serán alternativos cada hora, como en esta primera semana de movilizaciones.
Empresas y sindicatos esperan poder avanzar en relación al documento que permita convocar de nuevo a la mesa de negociación, poniendo fin a un conflicto que ya ha generado pérdidas millonarias.