Una estampa poco habitual

Durante los 365 días que dura el año, sólo en tres se puede contemplar una imagen que contrasta diametralmente con la actividad frenética que vive el puerto de Algeciras en lo que al transporte de mercancías se refiere: las grúas de sus terminales levantadas, lo que da muestra de que durante esas horas no se está operando en ninguno de los grandes buques que visitan de manera habitual estas instalaciones.

Coincidiendo con los días clave de la Navidad, los estibadores, de manera más que merecida, pueden disfrutar de tres jornadas de asueto para disfrutarlos con la familia. Así, el día 24 de diciembre, se procede al paro de la actividad a las 20 horas, para retomarla el 26 a partir de las 2 de la madrugada. La misma tónica para el día 5 de enero, cuando vuelven a interrumpirse el movimiento hasta el 7 con el mismo horario.

También se lleva a cabo un paréntesis para la celebración del cambio de año, aunque en este caso se para el 31 a las 14 horas para volver al tajo el día 2 también a las dos de la madrugada.

Sin duda, se produce una situación para nada habitual y que no pasa desapercibida para los ciudadanos, que incluso no dejan de pasar la oportunidad para sacar una instantánea de una imagen que contrasta con la frenética actividad que hacen del puerto de Algeciras uno de los de mayor tránsito del mundo.

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