El Consejo de Ministros de la Unión Europea que este lunes se inicia en Bruselas va a ser crucial para el sector pesquero ya que el secretario general de Pesca, Andrés Hermida, va a defender una mejora de las cuotas pesqueras para 2017 y aumentos importantes en algunas especies.
Este Consejo es el «más importante del año» ya que para España la prioridad es mejorar las cuotas respecto a las que propone la Comisión Europea y conseguir aumentos en especies.
España va a solicitar que se flexibilicen los llamados objetivos de rendimiento máximo sostenible (explotación pesquera para garantizar unos niveles biológicos seguros) y durante su exposición, va a plantear que, en vez de fijarlos para 2017, su implantación se aplace a 2018, 2019 y 2020, tal y como permite la política pesquera.
Entre los recortes más preocupantes para la flota española resalta el de la merluza en aguas ibéricas (-36 %), lo que afecta al Golfo de Cádiz, y del jurel o chicharro (-45 %) del oeste.
Hermida considera que si el Consejo de la UE admite la flexibilidad que pide España se podrían mantener o subir levemente esos cupos. España solicitará más cuota, porque en este caso, al igual que el gallo, se deben tener en cuenta la revisión de los cupos por las obligaciones de desembarcar capturas en los puertos, debido a la regla contra los descartes. En anchoa del Cantábrico y del Golfo de Cádiz, España quiere el TAC actual.
Nuestro país rechaza también una propuesta de la CE para aplicar un recorte general del 20 % en los cupos para los que no haya datos científicos y aboga por estudiar caso por caso. Además, va a pedir flexibilidad en especies con poca cuota, de forma que se contabilicen dentro de las especies para las que España tiene más TAC.
Para Andalucía, este aumento estaría justificado «no sólo por tratarse de la especie con mayor importancia comercial para la flota del cerco del Golfo de Cádiz, sino porque finalmente la cuota asignada a España suele revisarse al alza por los intercambios de cuotas que se realizan con Portugal». Asimismo, los informes científicos apuntan a que la situación del caladero es mejor que en años anteriores.